El pasado miércoles 21 de octubre, la cultura urbana entró con el discurso de nuestro director, Carles Vera, en el pleno del Ayuntamiento de Valencia.
Hace poco ya estuvimos reunidos con el alcalde de Valencia, así que pensamos que las instituciones se están abriendo a escuchar a la juventud y a movimientos innovadores, creativos e inclusivos que pueden mejorar la ciudad.
En su intervención reivindicó el reconocimiento de la cultura urbana por parte de las instituciones y, la construcción de instalaciones en espacios públicos para la práctica y la enseñanza de diferentes disciplinas urbanas (parkour, calistenia, telas aéreas, break dance y otros estilos).
A continuación os dejamos la transcripción traducida al español del discurso de Carles Vera en el ayuntamiento de Valencia. Podéis ver el vídeo original de la intervención en nuestro Facebook haciendo click aquí.
Transcripción del discurso en español
Buenos días,
Soy Carles Vera, soy presidente de la asociación Valencia Movement, también soy secretario del Consejo de la Juventud de Valencia.
Sin embargo, hoy no he venido ni como una cosa ni como la otra. Hoy he venido para traer la voz de una serie de colectivos, una serie de comunidades, de entidades, que representan la cultura urbana, el deporte urbano y el arte en Valencia.
Son colectivos, que a pesar de que son diversos -hablamos de parkour, de calistenia, de break dance y otros estilos de danza, hablamos por ejemplo del K-Pop, hablamos de slackline, de telas aéreas, también-, son todas prácticas que tienen lugar en nuestra ciudad. Muchas veces de manera informal. Muchas veces sin que las autoridades tengan conocimiento. Pero ahí están.
Todas estas comunidades tienen muchos puntos en común. Normalmente constituyen espacios muy horizontales donde todo el mundo tiene cabida. Espacios donde no se promociona la competición, sino la cooperación. Donde se enseñan, movimientos que llegan muchas veces a ser identitarios. Todos en nuestra ciudad.
Estoy aquí para trasladar lo que serían algunas reivindicaciones que también tienen en común todos estos colectivos. Yo personalmente llevo 13 años practicando parkour, también he hecho calistenia, he patinado… He recorrido Valencia de todas las maneras que os podáis imaginar.
Las reivindicaciones que tenemos que llevar son, en primer lugar, lo que podríamos llamar un reconocimiento institucional. No se trata de coger estas disciplinas y meterlas en una jaula, pero si de tener en cuenta que existen, que están ahí, que hay gente que se dedica.
Hemos constituido entidades, grupos más o menos formales, empresas solventes, y como a todos nos ha afectado la COVID, pero pienso que saldremos adelante. Valencia es una ciudad que tiene muchas posibilidades, que tiene un gran potencial. Ya no sólo por el clima, por la gente, por la cultura, o por la combinación de todas estas, sino por la gente que lo hace día a día. La gente que está dedicándose desde hace muchos años. En Valencia tenemos artistas, tenemos creativos, tenemos empresarios, tenemos gente del mundo asociativo que lleva muchos años en la calle, en diferentes lugares, entrenando. No sé si sabéis, por ejemplo, que en la parada de metro de Bailén hay gente que baila break dance. También están en los Tinglados. En los puentes se cuelgan telas aéreas. Son prácticas que son difíciles de institucionalizar, y tenemos que pensar cómo hacerlo, cómo dar voz, o cómo podemos comunicarnos con todas estas colectividades.
La segunda reivindicación viene muy en línea con lo que acabo de decir. Y no es otra cosa que espacios. Espacios públicos donde estas prácticas puedan desarrollarse de una manera reconocida, de una manera del todo legítima. En este sentido queremos agradecer el apoyo de instituciones como el ayuntamiento de Valencia, con iniciativas como el proyecto para reconvertir la rotonda de la torre de Miramar en un espacio útil. Que la idea no es convertirlo en un sitio donde todo vale, sino un lugar organizado que esté quizás incluso co-gestionado por entidades, por colectivos serios y responsables que puedan ayudar a que espacios como estos se conviertan en espacios de referencia – a nivel español, y más allá. Porque instalaciones que cuentan con movimientos de base, que tendrán actividades, que se podrán hacer eventos donde se podrán hacer actividades educativas… De esto no hay demasiados ejemplos, y Valencia tiene una oportunidad muy buena.
No es este el último proyecto en que podemos pensar apoyarnos. Tenemos la idea de que lugares como la Marina o como los Jardines del Turia son lugares excelentes donde se pueden desarrollar instalaciones y apoyar actividades con un gran potencial innovador e inclusivo que pueden enriquecer mucho nuestra sociedad, y beneficiar al final a toda la sociedad, a todas las personas que vivimos aquí.
Por último, queremos decir que, nosotros no… Es un movimiento muy amplio, es muy diverso, no tenemos una alineación política definida entre todas. Por eso quiero dejar muy claro que nos gustaría trabajar con todas las corporaciones políticas, con organizaciones y personas que tengan interés en hacer de esta ciudad una ciudad más diversa, una ciudad más inclusiva y, en definitiva, una ciudad más viva.
Muchas gracias.
